Elegguá en santeria es uno de los Orishas más poderosos. Por privilegio de Oxalá, es el primero y el último, Alfa y Omega, es decir es primero de los santos que debe ser invocado y el último en ser despedido. Sin su consentiemiento, ningún santo puede trabajar.
Antes de hacer cualquier consulta, un babalo (sacerdote santero) también tiene que pedirle permiso, para ello saca antes de sus consultas el caracol de Elegguá. Y solo si él se lo concede puede llevar a cabo sus consultas.
Eleggúa es desde un niño caprichoso hasta la figura más anciana y potente: Exú.
Entre medias tiene 21 caminos más. Es desde niño, hasta anciano sabio, dueño de las encrucijadas, el abre y cierra los caminos de las personas. Es todo.
Es mensajero entre los Orishas y los humanos. El mayor protector y el mejor guerrero. Nada se cumple si el no lo autoriza.
ORACIÓN
Señor de las encrucijadas,
del cruce de caminos
que es más que un amigo
y me da la confraternidad
que siempre he querido.
Trabajo muy duro y comprometido,
el de ser mensajero...
y receptor de nuestros pedidos
porque Oxalá u Obatalá así lo ha querido.